Creo que quien más quien menos sabe lo que sucede en el escenario de una relación sexual: besos, caricias, posturas, susurros, gemidos... Esto es lo que captamos con nuestros sentidos, pero ocurren más cosas que no estamos acostumbrados a percibir. Os invito a realizar una visita a lo que ocurre detrás del escenario... esto me recuerda a la famosa escena en la que Woody Allen va vestido de espermatozoide en "Todo lo que siempre quiso saber sobre el sexo y no se atrevió a preguntar".
Cuando conocemos a alguien que nos llama la atención, hablamos de "conexión", de "química", de "mariposas en el estómago", y de "hormigueo". Todas estas sensaciones se producen a nivel energético y se traducen en efectos físicos en diferentes puntos del cuerpo. Para llegar a entenderlas, necesitamos conocer algo más de la estructura energética del ser humano.
ESTRUCTURA ENERGÉTICA
Decimos del ser humano que está formado por cuerpo, mente, emociones y espíritu, como una manera de representar los diferentes cuerpos energéticos de los que estamos constituidos. El conjunto de cuerpos energéticos componen lo que conocemos como el aura, y cada uno de ellos tiene como punto de comunicación un centro energético, también llamado chakra.
Hay 7 cuerpos sutiles, cada uno con su propia función y vibración específica:
La primera capa del campo y el primer chakra están relacionados con el funcionamiento del cuerpo y la sensación física (sentir dolor o placer físicos) La primera capa guarda relación con el funcionamiento automático y autónomo del cuerpo.
La segunda capa y el segundo chakra se relacionan con el aspecto emotivo de los seres humanos, es el vehículo de expresión de nuestras emociones.
La tercera capa y el tercer chakra están asociados con nuestra vida mental.
La cuarta capa y el cuarto chakra se relacionan con el corazón; es el vehículo por el cual amamos, no solo a nuestra pareja, sino a la humanidad en general. Es lo que conocemos como Amor puro.
El quinto nivel y el quinto chakra, están relacionado con la voluntad en conexión con la voluntad divina; se le asocia también con el poder de la palabra y la comunicación.
El sexto nivel y el sexto chakra está asociado con la intuición, las percepciones extra-sensoriales, también llamado Tercer ojo.
El séptimo nivel y el séptimo chakra guardan relación con el pensamiento elevado, el conocimiento y la integración de nuestra formación espiritual y física.
Nuestra relación con el mundo se produce mediante el intercambio de energía a través de estos centros energéticos, y es posible tener conciencia de ello si prestamos atención a lo que ocurre cuando interactuamos con otras personas. Pongamos el ejemplo clásico de ese amigo que nos deja la sensación de agotamiento después de hablar con él, ¿qué ocurre en este caso? A nivel energético esa persona nos mantiene conectados a nivel del Hara, o centro principal de vitalidad del cuerpo, mientras nos aturde con su conversación incansable, impidiéndonos reaccionar apartándonos o aislándonos. Cuando notamos que nuestro nivel de energía va bajando nos sorprende observar que la otra persona, en cambio, parece eufórica y pletórica de energía: nuestra energía.
¿QUE OCURRE CUANDO DOS PERSONAS SE CONOCEN?
Las interacciones a nivel energético cuando dos personas se conocen podrían asimilarse a una función de escáner completo, en el que evaluamos su nivel vibracional, la apertura o cierre de sus chakras, sus patrones energéticos a nivel de personalidad, sus bloqueos, su forma de relacionarse con los demás... Esta evaluación se realiza a nivel subconsciente y a nosotros nos queda la sensación de si esa persona nos cae bien o mal, y en el mejor de los casos se produce una sensación de conexión, cuando la compatibilidad es elevada.
En el caso de dos personas muy compatibles a nivel sexual, se puede sentir ese hormigueo en el bajo vientre, esa excitación que se suele denominar "calentón", que no es más que el enlace a nivel del primer chakra y que provoca toda una serie de reacciones hormonales que conducen al deseo de un intercambio sexual inmediato.
Si coincidimos en personalidad con la otra persona puede que se formen lazos afectivos de amistad, o de aprecio, que surgen del segundo chakra.
Si además esas personas tienen formas de pensar parecidas y comparten a nivel intelectual gustos e intereses, se produce una conexión desde el tercer chakra, dando lugar a esas interminables conversaciones en las que saltamos de un tema a otro, a cual más fascinante, y que parece que el estar con esa persona nos inspira.
Si nuestro nivel afectivo está en un momento similar, y si aquella persona conecta con nosotros a nivel del corazón, nuestros cuartos chakras brillan y vibran al unísono, produciéndose la sensación de "enamoramiento", en la que el Amor por la otra persona nos vuelve abiertos, generosos, entregados.
En general las relaciones funcionan a estos cuatro niveles, pudiéndose producir conexiones también a nivel espiritual.
¿QUÉ OCURRE DURANTE LAS RELACIONES SEXUALES?
Hay tal variedad de situaciones posibles, que voy a enumerar sólo unas cuantas, las más habituales.
a) El Calentón (cuando se trata de una persona extraña):
En este caso se ha producido un vínculo a nivel del primer chakra y el intercambio sexual suele ser apasionado, intenso y la relación dura tanto como lo haga el propio intercambio sexual, ya que una vez satisfecha esa necesidad, ese fuego interior, desaparece el vínculo, y es cuando la gente comenta que al día siguiente, al despertarse (si es que han conseguido aguantar toda la noche junto a la otra persona), ven a su lado a un completo extraño. Y así es, ya que no se han establecido vínculos a ningún otro nivel.
b) Las amistades con derecho a roce (cuando sólo lo consideramos una amistad):
Los amigos tienen lazos a varios niveles, no necesariamente a nivel sexual, pero sí afectivo, ya que son compatibles al menos en un porcentaje para que se produzca una atracción más primaria. Puede venir o no acompañada de un calentón (una conexión a nivel del primer chakra intensa), o vivirse como una experiencia más genérica desde varios chakras. El nivel afectivo se suele mantener en el segundo chakra (es cuando decimos que queremos mucho a la otra persona, pero no la amamos), y esta situación suele mantenerse mientras ambos se sienten cómodos en los límites establecidos (es decir, que ninguno alcanza el cuarto chakra o intenta establecer vínculos más fuertes de los que la otra persona es capaz de asumir en ese momento). La relación sexual puede vivirse como muy placentera a nivel físico, y se mantiene una afectividad razonable como para no sentir que se está con un extraño, pero este tipo de relación suele carecer de la sensación de profundidad de un enamoramiento.
Hasta aquí nos movemos entre relaciones de primer nivel, o físicas, y cuando entramos en la esfera del cuatro chakra se dice que incluímos los aspectos espirituales en las relaciones sexuales.
c) El enamoramiento:
Dos personas que se enamoran, establecen lazos fuertes a través del cuarto chakra, y no sólo eso, sino que además sus cuerpos energéticos se fusionan cuando están juntos, cosa que no sucede en los dos casos anteriores.
Cuando dos personas enamoradas tienen relaciones sexuales, se produce un curioso intercambio de energías que conduce a la sensación de plenitud. Si tomamos el dicho popular que dice que el hombre ofrece amor a cambio de sexo y la mujer sexo a cambio de amor, nos podemos hacer una idea de lo que está sucediendo a nivel energético.
En la mujer el cuarto chakra está fuertemente activado y proyecta energía hacia el cuarto chakra de su pareja, que lo recibe, y lo metaboliza llevándolo hacia el primer chakra, provocando una reacción sexual que proyecta hacia ella. La mujer recibe esta energía a través del acto sexual y la metaboliza llevándola de nuevo al cuarto chakra, cerrando así el ciclo. Este intercambio va aumentando de vibración y de intensidad hasta llegar al orgasmo energético conjunto (que no tiene por qué coincidir con un orgasmo físico), que se manifiesta en esa sensación de plenitud y de pertenencia (cuando se dice que los dos son uno).
Por eso una mujer debe estar preparada para recibir la energía sexual masculina y la forma de llegar a ella es a través del chakra del corazón, por eso se dice que el hombre expresa su amor a nivel sexual, por eso cuando el hombre se siente rechazado a nivel sexual también lo siente como un rechazo emocional y personal, por eso la mujer necesita de una expresión afectiva después del acto sexual, ya que su cuarto chakra sigue abierto y muy activo....
De ahí la diferencia entre el sexo y hacer el amor, ya que las implicaciones a nivel energético y de vínculo son muy diferentes entre ambas personas.