- Michael, un aspirante a bodhisattva como tú debe buscar producir un corazón que no se estanque. Y te diré Michael, que tu corazón está ahora mismo estancado. No has superado tus pasiones terrenales. Para simplificar: estás atorado. Te pasas demasiado tiempo jugando al voleibol.
- Sí, pero pensé que eso estaba permitido, padre.
- Sí, pero no siete horas al día.
- Usted lo recomendó para liberar el estrés.
- Sí, así es, pero Michael, los monjes budistas no deberían tener un estrés equivalente a siete horas al día. Somos monjes budistas.
- ¿Qué debo hacer entonces?
- Mis padres murieron cuando tenía 10 años. Dos meses después, mi tío y yo nos mudamos a América. Me vi obligado a olvidar todo lo que conocía, para poder seguir adelante. A veces en la vida, tienes que hacer eso.
- ¿De dónde es, padre?
- Vietnam, de la provincia de Hau Nghia. Mis padres fueron asesinados en la guerra.
- ¿Por los americanos?
- Sí, y sin embargo me mudé aquí. La vida es extraña.
- Lo siento
- No, no, no. No es culpa tuya.... Olvida Michael, y sigue adelante.
28 de noviembre de 2009
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