Soy consciente de que el mundo que me rodea es un reflejo de lo que sucede en mi interior, y que cuando estoy preparada para dar un paso más en mi camino, me llega la información necesaria, los medios, y la oportunidad para hacerlo. Y el momento en el que me doy cuenta... como explicar la sensación de magia y de conexión que se apodera de mi, de curiosidad infinita, de ilusión máxima... se transforma en un "sí, quiero" con la vida, y en estos momentos con el Tao.
El Tao.... la armonía cósmica, una forma de seguir el camino del corazón, el equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu, esa sabiduría ancestral observada durante milenios por esos sabios taoístas, con la intención de transformar la energía hasta su estado original de armonioso equilibrio con todas las cosas y sobretodo con uno mismo.
El sistema taoísta, tan simple en apariencia, responde a mi necesidad cada vez mayor de llegar a la esencia de las cosas, que intuyo sencilla y a la vez extremadamente compleja, del uno al infinito.... y al mismo tiempo tan natural, como todo lo que tiene que ver con el ser humano... no creo que haya conductas antinaturales, algo antinatural es algo que simplemente no forma parte de la naturaleza, y si se puede ver, o experimentar, entonces ya forma parte de ello. Por ejemplo... un tsunami puede ser muy dañino, por la destrucción que causa, pero ¿es algo antinatural? es solo un mecanismo más, una forma de expresión de la Tierra. Los comportamientos humanos pueden ser dañinos, pero no por ello antinaturales... algunos son escalofriantes, es cierto, en un extremo de la polaridad, una que no me gustaría vivir, pero que es preciso aceptar, aceptar el lado oscuro como forma extrema de expresión, de desequilibrio, un síntoma más que una definición... pero sigo prefiriendo el equilibrio, esa zona media en la que conviven las polaridades sin lucha, en colaboración, el Yin y el Yang del Taoismo.
No hay bueno, ni malo, ni mejor ni peor... solo existe armonía o desarmonía.... y al final esa armonía es con uno mismo y con la concienca que nos da vida.